Barajas (España), 23 ago 08.- Los familiares de los fallecidos han recibido el consuelo del Obispo, quien inició el sermón afirmando que “viendo vuestro dolor y vuestro sufrimiento es muy difícil hablar”. Pero aún así, les ha recomendado que se abran a la Esperanza: “No creáis que vuestros seres queridos han muerto: viven para Dios”, porque “¡Él ha consolado a tantas y a tantas personas que pasaron por su lado! A Jesucristo se le conmovieron las entrañas tras la muerte de su amigo Lázaro, al ver a la viuda de Naím y comprobando el arrepentimiento del buen ladrón en la cruz” señaló.
Durante la homilía, Mons. Franco dio las gracias a los responsables de IFEMA por haberles permitido celebrar la Eucaristía en esa capilla improvisada, en la que, según sus palabras, se hallaba “concentrada toda la Iglesia: la de Canarias, encabezada por su Obispo; la de Madrid: el Cardenal que se encuentra en Alemania y no ha podido asistir; y también porque está reunida toda vuestra familia, ya que todos queremos ser, en estos duros momentos, vuestra familia”.
El Obispo Auxiliar de Madrid recordó a los fieles congregados que “la capacidad de compasión de Cristo es infinita” y les rogó, una vez más, que se abran a su Sagrado Corazón. Para concluir, recordó a María: “Mirad a la Virgen, Madre del Dolor, e invocadla, como hacemos en la Salve: vuelve a nosotros tus ojos misericordiosos”
Fuente: Analisis Digital
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