Ciudad del Vaticano, 27 jul 08.- El Secretario de Estado de su Santidad, cardenal Tarcisio Bertone presidió ayer por la tarde en la Basílica de San Juan de Letrán la Celebración Eucarística, con dos ordenaciones episcopales: la de Mons. Ambrogio Spreafico, obispo electo de Frosinone-Veroli-Ferentino; y la del arzobispo electo español, el jesuita Luís Francisco Ladaria Ferrer, nuevo secretario de la Congregación para la Doctrina de la Fe. En su homilía el purpurado recordó la cercanía espiritual de Benedicto XVI, y recordó el valor de la ordenación que confiere una misión con tres objetivos: ser maestros, pastores y sacerdotes.
El cardenal Bertone señaló que el Munus regendi es la identificanción del Obispo como pastor, mientras que el Munus docendi transforma al Obispo en Maestro, en testigo de la esperanza, porque su doctrina se funda en Aquel que es la esperanza: el Señor resucitado. En este sentido el Secretario de Estado Vaticano evocó las palabras del Santo Padre durante la XXIII Jornada Mundial de la Juventud en Sydney, Australia, cuando exhortó a abandonar “todo lo que no conduce a una genuina libertad, sino que lleva a la confusión moral o intelectual, a un debilitamiento de los principios, a la pérdida de la autoestima e incluso a la desesperación”. Y por último, el cardenal Bertone recordó el papel del Munus santificandi, que lleva al Obispo a vivir en la fe, en la esperanza y en la caridad, el propio ministerio de evangelizador y de guía de la comunidad.
“Queridos P. Ladaria y Mons. Spreafico, ésta es la misión que os espera. Diferentes son los deberes pastorales a los que el Señor os llama, pero único es el estilo con el que debéis ejercerlos. Tú, querido P. Luis Francisco –finalizó el cardenal Secretario de Estado Vaticano- ingresaste en la Compañía de Jesús en 1966, enseñaste Teología Dogmática primero en la Universidad Pontificia de Comillas de Madrid, y después en la Pontificia Universidad Gregoriana, de la cual fuiste vice-rector desde 1986 a 1994. Asimismo ofreciste tu apreciable contribución como miembro y después como Secretario de la Comisión Teológica Internacional. Ahora el Sumo Pontífice, llamándote a la Sede titular de Tibica con dignidad de Arzobispo, te asigna el delicado trabajo de Secretario de la Congregación para la Doctrina de la Fe de la que eres consultor desde 1993. Papel que desempeñarás con las competencias que todos reconocen en ti, y con esa fe en Cristo, en la Iglesia y en el sucesor de Pedro, que es típica del Fundador del instituto religioso al que perteneces”.
Fuente: Radio Vaticano
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